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Creadoras de #Imposibilidades

Hacer espacio

Y entonces inicia el nuevo año, le dimos las gracias al anterior y la bienvenida al nuevo, con todas las nuevas intenciones de lo que queremos crear y queremos que suceda (este si es el bueno).

Así yo también me encontré, creando las nuevas intenciones, definiendo lo que deseo crear en este año.

Y uno de estos días de diciembre escuché esta frase de la película COMER, REZAR Y AMAR:

“Si pudieras vaciar todo ese espacio que usas en tu mente para tu obsesión con el y tu matrimonio fallido, tendrías un vacío y una puerta.

¿Sabes qué haría el universo con esa puerta?, entraría corriendo, llenándote  de más amor, de lo que jamás soñaste.”

Y entonces lo vi, lo que realmente necesitada hacer…

HACER ESPACIO.

Vaciar todo aquello que ocupa mi mente una y otra vez, obsesionándome con los problemas, ideas, juicios, que en automático le doy atención.

Y pueden ser tan simples como:

“tengo que avisar que no voy a ir”, y en lugar de hacerlo, dejo ahí el pensamiento para después, como un post-it de algo que necesito hacer próximamente.

O más complicados, ya con una carga de preopupación o miedo, o de “y si no me quiere”, “y si no lo logro”, “y si no puedo”, que se guarda en un espacio más profundo, y que cuesta un poco de más trabajo sacar, y que sin darme cuenta se expande, y llena el espacio que podría ocupar  DIOS, o la vida, o cualquier cosa más grande.

Así que este mes, está dedicado a HACER ESPACIO.

Desde, tirando todo eso que está ahí HACIENDO ESPACIO, porque qué tal que lo ocupo después, en ese cajón abajo del lavabo del baño, o en los de la cocina.

“como es adentro es afuera”

Esta es una forma fácil de quitar cada cosa que ocupa energía mi alrededor, y que en mi cabeza, sin darme cuenta, ocupa un espacio para después.

Y desde luego, haciendo espacio con los pensamientos que ya no necesisto, procupaciones, ideas, creencias que impiden a la magia del universo acceder y entrar por esa puerta corriendo y llenarme de más amor, abundancia, poder de que jamás soñé.

He tirado juicios hacia mi y hacia otros, perdonado, poniendo a un lado ideas que me revolotearon por meses el año pasado, y que no me dejaron nada, más que ocupar el espacio.

Amo los años nuevos, los inicios, los nuevos proyectos, el estado cero, que inicia con toda la ilusión de lo que está por venir.

Pero me queda claro algo, que como dice NEVILLE GODDARD:

“A menos que usted abandone por completo su actual concepto de si mismo y asuma la naturaleza del nuevo nacimiento, continuará manifestando en su realidad sus limitaciones y carencias”

Así que…¿estás lista para hacer espacio?

Un abrazo

Mónica

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